Galletas de Queso Philadelphia y Vainilla

Una receta casera con sabor a hogar

Si hay algo que nunca falla, es el aroma de unas galletas recién horneadas saliendo del horno. Y cuando esas galletas tienen como base queso crema tipo Philadelphia y un toque de vainilla… el resultado es pura magia dulce. Estas galletas de queso Philadelphia y vainilla tienen una textura única: crujientes por fuera, tiernas por dentro, y una delicada dulzura que las hace irresistibles.

Ideales para acompañar un café, para regalar o simplemente para disfrutar en casa en cualquier momento del día. ¡Vamos a prepararlas!

Ingredientes necesarios

200 g de queso crema tipo Philadelphia
250 g de harina de trigo
100 g de mantequilla (a temperatura ambiente)
1 cucharadita de vainilla líquida
3 a 4 cucharadas de azúcar (ajustar al gusto)
Canela molida (opcional, para espolvorear)

Pasos para preparar estas galletas irresistibles

1. Mezclar los ingredientes base
En un bol grande, bate la mantequilla blanda con el queso crema y la vainilla líquida hasta obtener una mezcla cremosa y homogénea. Puedes ayudarte de unas varillas manuales o una batidora.

2. Incorporar la harina
Añade la harina poco a poco, mezclando hasta conseguir una masa lisa, suave y manejable. Si está muy pegajosa, puedes espolvorear un poco más de harina.

3. Reposar la masa
Forma una bola con la masa, envuélvela en film transparente y déjala en el frigorífico durante 30 minutos. Este reposo ayuda a que se compacte y sea más fácil de manipular.

4. Estirar y aromatizar
Saca la masa del frío y colócala sobre papel de horno. Estira con rodillo hasta obtener un rectángulo fino, de unos 2-3 mm de grosor. Espolvorea por encima el azúcar (y canela, si te gusta). La masa no lleva azúcar en sí, así que este toque es importante para darle dulzor.

5. Formar el rulo
Enrolla cuidadosamente la masa desde uno de los extremos hasta formar un rulo firme y compacto. Envuelve en papel de horno o film, y vuelve a enfriar unos 20 minutos más para que mantenga su forma al cortar.

6. Cortar las galletas
Con un cuchillo afilado, corta el rulo en rodajas de aproximadamente 0,5 cm de grosor. Colócalas en una bandeja de horno con papel vegetal, separadas entre sí, ya que crecerán un poco.

7. Hornear hasta dorar
Espolvorea un poco más de azúcar por encima y hornea en horno precalentado a 180°C durante unos 18-20 minutos, hasta que estén ligeramente doradas por los bordes.

8. Enfriar y disfrutar
Una vez fuera del horno, colócalas sobre una rejilla y deja enfriar por completo. Su textura mejorará mientras se enfrían. ¡Y ahora sí, a saborearlas!

Consejos útiles para un resultado perfecto

Usa queso crema entero y no light para una textura más rica.
Si quieres una versión más dulce, añade una cucharada extra de azúcar en la masa.
Puedes congelar el rulo ya formado y cortarlo en el momento que quieras hornear galletas frescas.
Añade a la masa ralladura de naranja o limón para un toque cítrico delicioso.
Acompáñalas con una mermelada suave o una taza de chocolate caliente.

Tabla nutricional aproximada (por 1 galleta, receta para 30 galletas pequeñas)

Valor nutricional	Por galleta (~20 g)
Calorías	95 kcal
Grasas totales	6 g
Grasas saturadas	3 g
Carbohidratos	9 g
Azúcares	2 g
Proteínas	1 g
Sodio	60 mg
Calcio	2 % VD

Los valores pueden variar según los ingredientes utilizados.

¿Con qué acompañarlas?

Estas galletas combinan perfectamente con:

Un café con leche por la mañana
Una infusión de canela o manzanilla por la tarde
Un vasito de leche tibia para los más peques
Helado de vainilla como postre rápido
Fruta fresca y yogur para un snack equilibrado

Preguntas frecuentes

¿Puedo usar margarina en lugar de mantequilla?
Sí, aunque la textura será más ligera y el sabor menos cremoso.

¿Se pueden hacer sin azúcar?
Sí, pero recuerda que la masa no lleva azúcar, así que es recomendable espolvorear al menos un poco por fuera o acompañarlas con algo dulce.

¿Cuánto duran una vez horneadas?
Hasta 5 días en un recipiente hermético. También puedes congelarlas una vez horneadas y recalentarlas ligeramente antes de comer.

¿Se puede aromatizar la masa con otros sabores?
Por supuesto. Puedes usar vainilla, almendra, limón, coco, o incluso añadir gotas de chocolate a la masa.

¿Puedo hacerlas sin gluten?
Sí, utilizando harina sin gluten. La textura cambiará ligeramente, pero funcionará.

¿Son aptas para niños?
Totalmente. Su textura y sabor suave son ideales para los más pequeños, y puedes controlar el nivel de azúcar fácilmente.

Conclusión: galletas simples, sabrosas y con mucho corazón

Las galletas de queso Philadelphia y vainilla son ese tipo de receta que guarda encanto en su simplicidad. No necesitas ingredientes sofisticados ni técnicas complicadas. Solo ganas de hornear, un poco de paciencia para los reposos… y mucho amor por los pequeños detalles.

Cálidas, crujientes, con ese punto cremoso del queso, son ideales para cualquier ocasión: desde una merienda improvisada hasta un regalo hecho en casa. Y lo mejor, ¡siempre desaparecen de la mesa en minutos!