Easy Pasta con Pollo y Brócoli Good

Si estás buscando una receta fácil, sabrosa y nutritiva para la comida o la cena, la pasta con pollo y brócoli es una opción excelente. Este plato es perfecto para quienes buscan una comida reconfortante, pero a la vez saludable, ya que combina proteínas magras, verduras frescas y una salsa cremosa que es simplemente irresistible.

La mezcla de pollo jugoso, brócoli crujiente y una salsa rica de crema y queso hará que este plato se convierta en uno de tus favoritos. Además, la preparación es sencilla, por lo que no necesitarás ser un chef experto para hacer que tu familia o amigos queden encantados.

A continuación, te explicamos paso a paso cómo preparar esta deliciosa pasta con pollo y brócoli, acompañada de algunos consejos para que salga perfecta. ¡Vamos a cocinar!

Ingredientes

Esta receta es fácil de hacer y no requiere muchos ingredientes complicados. Aquí tienes lo que necesitarás:

Ingredientes:

250 g de pasta (puedes usar fusilli, penne o cualquier otra que prefieras)
2 pechugas de pollo, cortadas en cubos pequeños
1 cabeza de brócoli, cortada en ramitos pequeños
1 taza de crema de leche o nata
1 taza de queso rallado (puede ser parmesano, mozzarella o el que más te guste)
2 dientes de ajo, picados
1 cucharada de mantequilla
1 cucharada de aceite de oliva
Sal y pimienta al gusto
1/2 cucharadita de nuez moscada (opcional, pero le da un toque especial)
1/2 taza de caldo de pollo o agua

Con estos ingredientes, tendrás un plato sabroso y lleno de sabor que puedes preparar en menos de 30 minutos. ¡Perfecto para días ocupados!

Instrucciones

Paso 1: Cocina la pasta

Comienza cocinando la pasta en una olla con agua y sal, siguiendo las instrucciones del paquete. Una vez cocida, escurre la pasta y resérvala. Asegúrate de no cocinarla demasiado, ya que se seguirá cocinando un poco cuando la mezcles con la salsa.

Paso 2: Cocina el pollo

En una sartén grande, calienta el aceite de oliva y la mantequilla a fuego medio. Agrega los cubos de pollo y cocina hasta que estén dorados y completamente cocidos, lo que debería tomar unos 7-8 minutos. Sazona el pollo con sal y pimienta al gusto mientras lo cocinas. Una vez que el pollo esté listo, retíralo de la sartén y resérvalo.

Paso 3: Saltea el ajo y el brócoli

En la misma sartén, agrega un poco más de aceite si es necesario y saltea el ajo picado durante aproximadamente un minuto, hasta que empiece a liberar su aroma. Ten cuidado de no quemarlo. Luego, agrega los ramitos de brócoli a la sartén y cocina durante unos 5-7 minutos, o hasta que se ablanden un poco pero todavía mantengan su textura crujiente. El brócoli debe quedar al dente, ya que al mezclarlo con la salsa y la pasta, terminará de cocinarse.

Paso 4: Prepara la salsa cremosa

Agrega la crema de leche o nata a la sartén con el brócoli y deja que se caliente a fuego lento durante unos minutos. Esto creará una base cremosa para la salsa. Luego, agrega el caldo de pollo (o agua, si no tienes caldo) y revuelve bien para combinar todos los ingredientes. Cocina la mezcla a fuego lento durante 2-3 minutos, asegurándote de que todo esté bien integrado.

Paso 5: Incorpora el queso y sazona

Es el momento de agregar el queso rallado. Vierte el queso en la sartén y revuelve hasta que se derrita completamente, formando una salsa cremosa. Si usas queso parmesano, se derretirá fácilmente, y si prefieres mozzarella, obtendrás una textura más elástica. Luego, sazona con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada (si decides usarla). La nuez moscada le dará un toque extra de sabor y profundidad a la salsa.

Paso 6: Agrega el pollo y la pasta

Vuelve a poner el pollo en la sartén con la salsa y mezcla bien para que se impregne de la salsa cremosa. Luego, agrega la pasta cocida a la sartén y revuelve hasta que todo esté bien mezclado. Cocina a fuego lento durante 2-3 minutos más para que todos los sabores se integren y el plato esté bien caliente.

Paso 7: Sirve y disfruta

Finalmente, sirve la pasta con pollo y brócoli inmediatamente. Puedes decorarla con un poco más de queso rallado por encima o incluso con hierbas frescas como perejil o albahaca, si te gusta. ¡Listo! Ya tienes un plato delicioso, reconfortante y nutritivo.

Consejos para una pasta perfecta

Pasta al dente: Asegúrate de cocinar la pasta al dente para que no se pase de cocción cuando la mezcles con la salsa. Si prefieres una pasta más firme, resérvala un minuto antes de que termine el tiempo de cocción recomendado en el paquete.
Variedad de quesos: Puedes utilizar cualquier tipo de queso que te guste, pero el queso parmesano o la mozzarella son ideales para esta receta. Si buscas una opción más cremosa, puedes agregar un poco de crema adicional o incluso un toque de leche.
Opción sin lácteos: Si prefieres una versión sin lácteos, puedes sustituir la nata por una crema de avena o de almendras. El queso también se puede reemplazar por una opción vegana, como queso vegano rallado.
Más verduras: Si te gusta variar las verduras, puedes agregar espinacas frescas o zanahorias ralladas a la mezcla. Estas opciones le darán más color y nutrientes al plato.

Beneficios Nutricionales

El plato de pasta con pollo y brócoli no solo es delicioso, sino también nutritivo. El pollo aporta proteínas magras, mientras que el brócoli está lleno de fibra, vitaminas y minerales esenciales. La pasta te da la energía que necesitas para el día, y la salsa cremosa con queso le añade un toque de indulgencia, sin ser demasiado pesada.

A continuación, te ofrecemos una tabla de nutrición aproximada para cada porción:

Tabla de nutrición por porción (aproximadamente 1/4 de la receta):

Componente	Cantidad
Calorías	450 kcal
Proteínas	30 g
Grasas totales	22 g
Grasas saturadas	9 g
Carbohidratos	45 g
Fibra	4 g
Azúcares	3 g
Sal	1 g
Calcio	150 mg
Hierro	2 mg

Este plato es equilibrado, proporcionando una buena cantidad de proteínas gracias al pollo, y una dosis de fibra y vitaminas gracias al brócoli. La pasta ofrece carbohidratos complejos que te darán energía, mientras que la crema y el queso añaden una textura rica y cremosa.

Conclusión

La pasta con pollo y brócoli es una receta deliciosa, fácil de hacer y perfecta para cualquier día de la semana. Con su salsa cremosa y sus ingredientes saludables, este plato es una opción ideal para una comida reconfortante y nutritiva. Si te gustan los platos con una mezcla de sabores cremosos y frescos, esta receta no te decepcionará.